Hoy es el día de Halloween.
No sigo mucho esta tradición, porque odio disfrazarme, cosa que me da más rabia aun cuando a mis amigos, no sé por qué, les encaaaaaanta y siempre buscan cualquier excusa, sea Halloween, Carnavales o pleno verano... Este año mismo tuve que ir a un cumpleaños disfrazada, en el mes de mayo, en un bar que estaba abierto al público. Imagínate, con el sentido del ridículo que tengo... Vamos, me faltó el canto de un duro para no ir, no me gusta que me impongan esos requisitos, más aun cuando no es ninguna fecha que tenga que celebrarse así, de esa guisa. No me siento nada cómoda. Aparte del hecho de tener que pensar y comprar o hacerte un disfraz. No, desde luego que no es lo mío... Ya bastante me "disfrazo" en fin de año :P
Os dejo unas fotitos que hice que vienen al pelo con esta tradición que, aunque importada, cada vez está más extendida en nuestro país:
Pues nada, que compré una calabaza, pero no para Halloween, sino para hacer una crema de calabaza. Y la verdad es que salió riquísima: al contenido de esta calabacita le añadimos una patata grandota, dos cebollas pequeñas y dos zanahorias grandes. Un poquito de agua, para no tirar nada después de cocida, y una cucharadita de sal. Me encantó el resultado
Pero ya que teníamos la calabaza, pues hice el experimento. Debo reconocer que no le puse mucho entusiasmo ni imaginación, pero para ser la primera que hacía me doy por satisfecha.
Os dejo para empezar el mes con un calendario de noviembre que hice con fondo de una de estas fotos realizadas para la ocasión. Pincha en la foto para descargar en tamaño más grande
Dulces y terroríficas noooocheeeeesss!!